Creación de espacios y procesos de capacitación dirigidos a múltiples actores, en temas de prevención de violencia contra la niñez y adolescencia, la denuncia y el acceso a instancias de protección y de justicia. También se abordan los derechos de las personas migrantes y su protección. Consiste en un proceso de trasformación que empodera a niñas, niños, adolescentes, adultos, padres de familia y líderes hacia una acción local preventiva basada en la colaboración.
Este es un programa no residencial que acerca y facilita el acceso al servicio de atención psicosocial a las víctimas, es desarrollado por duplas de profesionales conformadas por una Psicóloga y una Trabajadora Social que atienden a través de las clínicas departamentales y se trasladan a las comunidades y hogares de las niñas, niños y adolescentes.
Constituyen criterios generales de actuación en este programa, el conocimiento de las problemáticas en el contexto, habilidades de empatía y escucha activa con la víctima y su familia, además de un compromiso profesional con la confidencialidad.
La atención se brinda a través de un modelo de gestión de casos con enfoque de derechos.